El
subsecretario de Seguridad Pública y Participación Ciudadana, Gustavo
Pereyra, se refirió a los hechos de violencia que se desataron luego de
la protesta que dirigentes de la Asociación de los Trabajadores del
Estado (ATE) realizaron en la sede del Consejo Provincial de Educación
(CPE), y que dejaron como saldo a 9 agentes policiales con heridas de
diversa consideración.
El
subsecretario dijo que "este gobierno ha remarcado en más de una
oportunidad que no se opone a la protesta, que no se opone a la
manifestación, tienen el libre ejercicio de hacerlo", aunque dejó en
claro que "sí estamos en contra -y se ha reiterado en muchas
oportunidades-, que no se van a permitir desmanes, hechos de violencia
contra el patrimonio público, del Estado, y la quema de cubiertas".
"Los
dirigentes tienen toda la libertad de manifestarse en su lugar de
trabajo-sostuvo Pereyra y agregó-; sin embargo la quema de cubiertas
daña gravemente la salud de las personas y el medio ambiente".
En
este punto recordó que en el mes de junio, cuando manifestantes
"destrozaron el edificio de Economía y Obras Públicas las quejas que
había de los habitantes de la zona y de una clínica que esta a una
cuadra y un jardín maternal en la otra cuadra, motivaron la firme
decisión del gobierno de impedir la quema de cubiertas".
Consecuentemente,
Pereyra, dijo que "independientemente de que el Estado está accionando
con este tipo de medidas, vamos a actuar judicialmente por los daños y
perjuicios ocasionados, en coordinación con el municipio local para
labrar infracciones contravencionales contra la quema de cubiertas".
En
horas de la mañana de este martes, dirigentes de la Asociación de los
Trabajadores del Estado (ATE) concurrieron a la sede del Consejo
Provincial de Educación (CPE) y comenzaron allí una manifestación. Al
advertirse allí la presencia de cubiertas, y la quema de éstas por parte
de estos dirigentes, personal policial que se había constituido en el
lugar notificó y les pidió a los dirigentes de ATE que cesen con la
quema de cubiertas por los daños a la salud y el daño ambiental que
causan ese tipo de prácticas.
Posteriormente
la Policía, junto a personal de Bomberos, procedió al apagado de las
cubiertas. Transcurrido un tiempo prudencial, se suscitaron hechos de
violencia que terminaron con el saldo de 9 policías con heridas de
diversa consideración, con el daño a algunos vehículos particulares y a
algunos comercios de la zona.
Estado de los efectivos policiales
En
este momento los policías heridos se encuentran siendo evaluados
médicamente: cinco de ellos pertenecen al grupo de seguridad
metropolitana, tres a Bomberos, y un agente de la oficina de
coordinación operativa.