foto: Mef. |
Piedra del Águila , te yergues altiva
en medio del camino.
Cruzan tus suelos las vertientes
que nutren las entrañas de tú valle fértil.
Cielos azules, atardeceres apacibles
invitan al caminante a contemplarlos.
Surcan el aire, guiadas por los vientos
las águilas que te dieron su nombre.
Moradoras de los cerros que te rodean.
Piedra del Águila, egnimática, bella
y sencilla.
Donde su gente, construye cada día,
sueños de amor, de progreso,
de un mañana mejor.