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El adolescente de Rawson tiene una enfermedad vinculada con el reflujo que lo aqueja desde bebé. Esta afección, con el transcurso del tiempo, le afectó al funcionamiento renal a tal punto que a los 14 años perdió completamente la funcionalidad renal. Solidaridad y sentido ético de la vida, juntos.
Marcos Morón, el profesor de música chubutense que le donará un riñón a Franco Raffo, su alumno y actual ahijado de 19 años, manifestó que "donar órganos salva vidas".
"Me van a sacar un riñón para dárselo a él, pero a los dos se nos va a mejorar la calidad de vida", afirmó Morón a Télam en las puertas del Hospital Italiano, de donde salían con Franco luego de realizarse los estudios preparatorios al trasplante.
Morón contó que conoce a Franco "desde hace más de una década", cuando en ese entonces el niño, que desde hace 3 años es su ahijado, comenzó a tomar clases de percusión en el Círculo Social de Rawson, ciudad en donde ambos viven.
"Siempre supe de la enfermedad que padecía Franco y la idea de poder ayudarlo daba vueltas en mi cabeza desde hace tiempo", sostuvo.
"Cuando me decidí lo hablé con su mamá, porque no quería que él se entere para no generarle ninguna expectativa, pero para poder hacer el análisis de compatibilidad tuve que venir con él a Buenos Aires", agregó Morán.
Por su parte, el padre de Marcos, Omar Morón, reconoció que "no me sorprende la decisión que tomó Marcos de donarle un riñón" a Franco Raffa porque "siempre fue así, solidario y comprometido con el prójimo".
"Quizá sea su formación cristiana pero también su experiencia de vida", planteó Morón, porque "desde chico tuvo una actitud solidaria, a punto que teníamos que andar cuidando que no traiga gente que veía por la calle o la plaza".
Por su parte, Raffo, el joven que recibirá el trasplante, destacó que "cuando Marcos me dijo que quería ser él quien me donara un riñón no le creí nada, pensaba que me estaba haciendo una joda, pero cuando veía que insistió ahí le creí y nos abrazamos, fue muy lindo".
"En febrero nos realizamos los estudios de compatibilidad, que tardaron 45 días, y luego esperamos otro mes y medio para que un juez me autorizara a ser un donante vivo no relacionado", manifestó el profesor de música.
Además, agregó que "nos sirvió mucho la jurisprudencia que dejó Sandra Mihanovich", quien en agosto pasado le donó un riñón a su ahijada, Sonsoles Rey Obligado.
"Con nosotros se repitió la historia", sostuvo Morón: "nosotros somos el segundo caso de estas características, y fue gracias a la acción de Mihanovich que salió muy rápida la autorización para que yo sea el donante de Franco".
"Estos casos son ejemplos para tomar conciencia y darse cuenta que es bueno dar, y que hay mucha gente que está en lista de espera de un donante cadavérico pero que dentro de la familia o los vínculos hay personas habilitadas para donar", sostuvo el padrino de Franco Raffo.
"Yo sé los riesgos que conlleva toda cirugía, pero valoro más la bendición que trae donar órganos, porque en lo personal siento que es algo muy especial que no me saca nadie, porque es más lo que recibo que lo que estoy dando", subyaró Morán.
El adolescente tiene una enfermedad vinculada con el reflujo que lo aqueja desde bebé y esta afección, con el transcurso del tiempo, le afectó al funcionamiento renal a tal punto que a los 14 años perdió completamente la funcionalidad renal, detalló Morón.
Desde entonces, Franco debe hacerse diálisis peritoneal en su casa y viajar a Buenos Aires una vez por mes a realizarse controles hasta que sea trasplantado.
Morón precisó que en veinte días finalizará con sus estudios pre trasplante y será entonces cuando le den una fecha concreta para la intervención que se realizará en el Hospital Italiano, del barrio porteño de Almagro. (Télam)
