El 28 de mayo fallece Rosario Vera Peñaloza en la provincia de la Rioja ( 1950), en su memoria se declara el día de los Jardines de Infantes y de las maestras jardineras.
Tuvo una extensa trayetoria dentro de la educación argentina y fundamental relevancia en la creación de las primeras salas de Jardín de Infantes permitiendo que los niños/as accedieran a la apropiación y producción de saberes.
Como docente su lucha incansable le posibilitó lograr que el estado garantice el sostenimiento de estas instituciones educativas necesaria para la infancia.
Un logro valioso para la generación de esta educadora argentina que supo vislumbrar la necesidad de la educación temprana de los niños/as.
Un logro valioso para la generación de esta educadora argentina que supo vislumbrar la necesidad de la educación temprana de los niños/as.
Entendía que la reforma educativa debía surgir desde las bases, desde cada maestro en su escuela y desde cada comunidad particular. De allí, que en los últimos años de su vida su prédica estaba dirigida a los docentes.
Entre sus ideas que aún hoy conservan vigencia se destacan:
La responsabilidad política y social del Estado respeto de la educación de la primera infancia.
Advierte a la sociedad de la necesidad de promover a la infancia de una educación plena a través del descubrimiento y la creatividad.
Valora la tarea del docente como un referente pedagógico y ético que trasmite y recrea cultura y valores.
Interpreta que la didáctica permitiría intrumetalizar, poner en acción, los discursos pedagógicos. Al mismo tiempo, los problemas de la puesta en práctica darían nueva forma al discurso pedagógico.Busca la coherencia y la permanente reflexión entre teoría y práctica.
Considera que el Jardín de Infantes es una institución educativa integral, útil, necesaria e insustituible.
La figura de Rosario Vera Peñaloza consagrada a la causa educativa fue objeto de reconocimientos y homenajes y aún contribuye a comprender el pasado y plantearnos nuevos interrogantes sobre el presente.