sábado, 12 de enero de 2013

Bariloche: niegan a Goye un pedido de interpelación y avanza el juicio político

El Concejo Deliberante negó a Omar Goye exponer su visión de los saqueos: los integrantes, en su mayoría, sostuvieron que se podrá defender en el proceso de revocatoria. Se avanza a un juicio político. 

El pedido del intendente Omar Goye, de ser interpelado públicamente, fue rechazado por el Concejo Deliberante. La mayoría de los miembros de ese cuerpo sostuvieron que el funcionario se podrá defender en el proceso de revocatoria y que la solicitud buscaba "distraer la atención".

Los ediles, de esta forma, resolvieron avanzar con el proceso de juicio político a Goye que podría desembocar en su destitución del cargo, luego de que el gobernador rionegrino Alberto Weretilneck y el senador nacional Miguel Ángel Pichetto le pidieran la renuncia.

El intendente de Bariloche había solicitado hoy ser interpelado públicamente a fin de exponer su visión de los saqueos ocurridos en diciembre pasado en esa ciudad rionegrina.

El concejal del Frente para la Victoria, Ramón Chiocconni, anticipó que la bancada oficialista rechazará el pedido del intendente, al que calificó como "un manotazo de alguien que pretende imponer una agenda mediático".

"No corresponde que solicite que lo interpelemos y mucho menos poniéndonos plazos y tema", agregó, antes de afirmar que "no necesitamos preguntarle nada más al intendente" dijo.

La semana pasada, Goye denunció un "golpe institucional" de parte del gobernador Alberto Weretilneck y Pichetto, luego de que ambos le pidieran la renuncia, como derivación de los disturbios del 20 de diciembre en varios supermercados.

Según el diario Río Negro, Goye solicitó a los concejales barilochenses que lo convoquen a la brevedad para discutir "de cara al pueblo" todas las dudas sobre las "responsabilidades de los saqueos y sus posteriores consecuencias".

"Estos no son tiempos para el silencio y la especulación", advirtió el jefe comunal en su solicitud y consideró que su exposición sería "un paso primordial para que la ciudadanía, a través de sus representantes, tenga las cosas claras".

El intendente insistió en la necesidad de que la ciudad "vuelva rápidamente a la normalidad institucional" y se garantice "la gobernabilidad para seguir desarrollando el cargo para el que fui elegido".

La semana pasada, ante el pedido de renuncia que le hicieron el gobernador Weretilneck y el rionegrino Pichetto, el intendente barilochense fue terminante: "No me voy a ir porque me votó la ciudadanía", aseveró.

En una conferencia de prensa brindada oportunamente, también avisó que estaba dispuesto a "resistir cualquier intento de golpe institucional".
Fuente:lapolíticaonline